Existen tres tipos de egresos o desembolsos:

 

1. INVERSIONES.
Es todo desembolso que se realiza con el propósito de generar retorno, del monto desembolsado más un valor adicional.

 

2. COSTOS.
Son los desembolsos destinados a financiar un producto o servicio que se va a vender. Estos desembolsos son variables porque dependen de la cantidad de productos o servicios que se venderán. También los denominan gastos variables.

 

3. GASTOS.
Son aquellos que se desembolsan obligatoriamente con determinada frecuencia (por ejemplo mensual) y se hacen se venda o no se venda, o sin esperar un retorno. También se les denomina gastos fijos.

 

Tener claro estos tres tipos de egresos/desembolsos (ya sea en finanzas personales como empresariales) es importante porque te permiten controlar y gestionar mejor el dinero a partir de las decisiones que se toman.

Por lo general los GASTOS fijos son los que erosionan los ahorros (en personas y familias) o los márgenes de rentabilidad (en empresas) y deben ser controlados detalladamente.